ECONOMÍA ARTICULAR: Mejora el movimiento y disminuye le cansancio físico

La Economía Articular, es una técnica empleada en Terapia Ocupacional para disminuir la sobrecarga articular Consiste en una serie de medidas, según la articulación afectada, destinadas a modificar los hábitos de la vida diaria en la realización de gestos y actividades donde esa articulación puede verse sobrecargada o dañada, debido a posiciones inadecuadas, sobrecarga o carga mal distribuida, así como la utilización de objetos no adecuados.

La Economía Articular se incorporará de la mano del Terapeuta Ocupacional en nuestras actividades diarias: vestido, aseo, preparación de alimentos o hacer la compra. Se aplicará tanto en la realización de los movimientos como en las posiciones que se adoptan: sentado, de pie, durante el trabajo o el descanso.

La Economía Articular disminuye el dolor, malestar y el cansancio, facilitando el movimiento articular, al mismo tiempo, que previene posibles deformidades o si ya las hay, evita la progresión de estas.

El Terapeuta Ocupacional será el encargado de llevar a cabo un programa de protección y economía articular, de la articulación afecta del paciente para:

  • Establecer una educación gestual, descubriendo que gestos favorecedores de las deformidades y encontrar los gestos correctos, corregirlos, e integrarlos hasta hacerlos automáticos, asesorando sobre qué hacer y qué se ha de evitar.
  • Planificar las actividades y los tiempos de realización, alternando trabajo-reposo, y jerarquizando por orden de importancia las actividades para conservar energía, reducir el dolor, la inflamación y las cargas articulares, con el fin de conservar las estructuras articulares y disminuir el riesgo de deformidades.
  • Enseñar las técnicas adecuadas, dando alternativas y modificando los patrones de movimiento, usando si es necesario dispositivos de ayuda. Por ejemplo:
  • Reducir el esfuerzo a la hora de realizar las actividades.
  • Distribuir la carga entre varias articulaciones.
  • Usar las articulaciones más grandes y fuertes.
  • Usar las articulaciones en posiciones estables y funcionales.
  • No sostener de forma prolongada objetos estrechos o pesados
  • Evitar movimientos repentinos
  • Mantener equilibrio entre actividad y descanso

Tener conciencia de la necesidad y beneficios de economizar nuestros gestos, no es tan importante… hasta que los tenemos que realizar de manera obligatoria, por determinados procesos patológicos que no nos permiten movernos “dentro de las formas a las que estamos acostumbrados”, que por cierto, no han sido las mejores… (Aunque en su momento han sido las “más cómodas”).

Carmen Martín Rico Terapeuta Ocupacional. Centro CRECEN