La Práctica Mental mejora la Recuperación Funcional Post-Ictus

Uno de los métodos más estudiados y desarrollados en los últimos años en la rehabilitación del Ictus, es la llamada “imaginería motora o práctica mental”. Esta terapia consiste en evocar de forma imaginaria un movimiento concreto, con el objetivo de re-aprenderlo o mejorarlo.

Se ha demostrado que la imaginación de un movimiento produce una activación en la corteza motora cerebral similar a la que se observa al realizar realmente dicho movimiento.

La “Práctica Mental” se puede realizar mediante una vía externa o “Visual”, que consistirá en imaginarse a sí mismo realizando una, desde el punto de vista de una tercer persona que nos ve hacerlo, o mediante una vía Interna o “kinestésica” en la que imaginaríamos las sensaciones del movimiento en nuestro propio cuerpo.

Existen numerosos estudios científicos realizados en los últimos años, que sustentan que, la combinación de esta terapia, junto con las terapias de fisioterapia y terapia ocupacional convencionales, supone una mejor recuperación funcional después de un Ictus, repercutiendo de esta forma, en una mayor autonomía personal en el desempeño de las actividades de la vida diaria.