Los días 27 de Octubre y 29 de Octubre celebramos, respectivamente, el día mundial de la Terapia Ocupacional y del Ictus

La Terapia Ocupacional es imprescindible en el proceso Neuro-rehabilitador del Ictus, junto con el Fisioterapeuta, Logopeda y Neuropsicólogo.

El objetivo de la Terapia Ocupacional es conseguir la mayor autonomía posible de las personas que hayan un sufrido un ictus en sus actividades de la vida diaria, adaptándole a la discapacidad o los déficits que le haya ocasionado el ictus, evitando la dependencia de una tercera persona.

Para ello, el Terapeuta Ocupacional se ocupará de la recuperación funcional del miembro superior (brazo y mano) afectado por el ictus, fundamental para recuperar la mayor autonomía posible, a través de la realización de distintos ejercicios.

Además enseñará a los pacientes a ejecutar las tareas de un modo distinto, de acuerdo a su discapacidad, a utilizar distintos productos de apoyo (como cubiertos o platos adaptados) e indicará la necesidad de ortesis de mano. Por tanto, su presencia es fundamental en el proceso rehabilitador.

Por todo lo anterior, si ha sufrido un ictus que le ocasiona dependencia en su vida diaria, y/o pérdida de movilidad o de sensibilidad en un lado del cuerpo, el terapeuta ocupacional es el profesional al que debe acudir, para trabajar en el centro de rehabilitación con las otras disciplinas, o a domicilio, para realizar los entrenamientos en su entorno real.

Lorena García Tavera. Terapeuta Ocupacional del centro CRECEN