PROBLEMAS de LECTOESCRITURA y LATERALIDAD CRUZADA

 

Se habla de “Dominancia” manual o podal cuando existe una preferencia o mayor facilidad para utilizar una de las manos (derecha o izquierda) para ejecutar acciones como coger objetos o escribir o uno de los pies para efectuar acciones como chutar una pelota, mantenerse en pie con sólo una pierna, etc…

También existe la Dominancia ocular (siempre hay un ojo con el que se prefiere para mirar por un catalejo o apuntar con una carabina, se trata del ojo dominante. Y la Dominancia auditiva (preferencia o tendencia a escuchar más por un oído que por el otro, por ejemplo, al coger un auricular, un teléfono móvil…)

Hablamos de lateralidad homogénea cuando mano, pie, ojo y oído ofrecen una dominancia en el mismo lado ya sea en el lado derecho (diestro) o izquierdo (zurdo).

Estamos ante una lateralidad cruzada cuando existe una lateralidad distinta de la manual para pies, ojos u oídos (por ejemplo mano derecha dominante con dominio del ojo izquierdo). En estos casos también se habla de “asimetría funcional”. La lateralidad cruzada,  con frecuencia es sinónimo de problemas en el aprendizaje, en especial en los procesos de lectura y escritura. También puede ocasionar dificultades en el cálculo, en la organización tanto en espacio como en tiempo, en reconocer la izquierda y la derecha

La intervención en niños con lateralidad cruzada es un tema que genera mucha controversia. Hay que realizar una correcta historia clínica para conocer los diversos factores que hayan podido causar la lateralidad cruzada. Una vez realizada la valoración, la intervención se centra en la dominancia de la mano. Es decir, se observará al niño cómo y con qué mano realiza diferentes actividades, y con la mano con la que realice más actividades, será la mano dominante. Por consiguiente, se centrará en potenciar la ejecución de actividades y tareas con esta mano

Victoria Vicario Armada. Logopeda Centro CRECEN